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La empresa china UBTech presentó el jueves pasado en la ciudad de Shenzhen, el primer robot humanoide del mundo capaz de cambiar sus propias baterías por sí mismo. Todo sin necesidad de apagarse, ni requerir asistencia humana, así lo informó la agencia de noticias Reuters.
La aplicación de esta tecnología evita interrupciones en las tareas debido a tiempos de inactividad durante la carga, lo que permite un funcionamiento continuo a la vez que reduce los costes de mantenimiento y mejora la eficiencia general de la producción.
“Anteriormente, una de las principales desventajas de los robots era su limitado horario de funcionamiento, que a menudo sólo duraba unas cuatro horas. La tecnología de intercambio de baterías extiende eficazmente el tiempo de funcionamiento continuo”, declaró Fan Congming, presidente ejecutivo de la Asociación de la Industria de Inteligencia Artificial de Shenzhen.
“De lo contrario, tienen que detenerse para cargar y luego volver a trabajar, pero la línea de producción no puede permitirse detenerse. Por lo tanto, esta tecnología permite que los robots trabajen de forma continua, lo que significa que los robots humanoides pueden convertirse en equipos estándar en las líneas de producción y en las fábricas”, agregó Congming.
Robots en la industria manufacturera
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El hecho de que exista un robot capaz de cambiar por sí mismo sus baterías es una buena noticias, principalmente para las líneas de producción manufacturera que están acelerando el ritmo de mejora de la automatización en las fábricas.
Desde principios de este año, varias empresas chinas de robots humanoides han conseguido pedidos de fabricantes de automóviles, enviando cada vez más robots a sus fábricas.
El trabajo de los robots incluye principalmente la manipulación y la inspección de calidad en sectores como la fabricación de automóviles y productos electrónicos. Los avances tecnológicos en soluciones energéticas facilitan un funcionamiento más prolongado y estable de los robots, mejorando la seguridad y la fiabilidad de su trabajo en la fábrica.
“Las empresas están adoptando procesos de fabricación más inteligentes. En la producción industrial, tareas como el traslado, el pulido, la soldadura y la pulverización, junto con la elevación de cargas pesadas y el paletizado en la industria automotriz, suelen ser repetitivas y requieren mucha mano de obra, por lo que utilizamos robots para reemplazar la mano de obra en estas tareas”, declaró Xing Fan, gerente de producción de una fábrica de robots en la ciudad de Foshan.
Según un informe sobre la industria de la robótica humanoide, publicado en la Conferencia Mundial de IA 2024 en Shanghái, el mercado chino de robots humanoides alcanzó aproximadamente 381.28 millones de dólares en 2024, y se espera que para 2029 alcance los 10.3 millones.
Informantes del sector afirman que, impulsados por políticas de apoyo, los robots humanoides están recurriendo a aplicaciones prácticas, y la industria está entrando en una fase de desarrollo acelerado. Se espera que este tipo de robots se incorporen primero al sector manufacturero, para luego expandirse gradualmente al sector servicios y, finalmente, al ámbito doméstico gracias a la reducción de precios y al efecto de escala.